Ribeira de Pena

El municipio de Ribeira de Pena, perteneciente al distrito de Vila Real, está atravesado por el río Tâmega. Con valles profundos y paisajes variados, el municipio es llamado por muchos la «Sintra de Trás-os-Montes».

Ribeira de Pena es un municipio rico en restos arqueológicos, ejemplos de diferentes ocupaciones, desde el Neolítico hasta la cultura castreña, destacando los castros de Cabriz y Lesenho.

Quedan ejemplos de ocupación romana, como el Ara a Júpiter, adosada a un muro de la Iglesia de Santa Marinha, el Ara do Concelho y el Tesouro Monetário de Terra Nova.

Con el fin del Imperio Romano, nuevas gentes se asentaron en el territorio. Necrópolis de tumbas excavadas en la roca, de forma antropomorfa o rectangular, son testimonios de este período de transición. «Frecuentes en las rocas y fuente de diversas leyendas son los grabados conocidos como «cantinhos», con probable origen en la Edad Media».

El primer fuero de Ribeira de Pena data de 1331, concedido por D. Afonso IV, y el segundo fue concedido por D. Manuel I. «D. Nuno Álvares Pereira, el Condestable, a través de su matrimonio con D. Leonor Alvim, de Pedraça, poseía varias propiedades en el concejo y la Quinta da Temporã formaba parte de la donación a su hija en matrimonio con el hijo bastardo de D. João I, origen de la Casa de Bragança».

Durante la reforma administrativa del siglo XIX, el condado estuvo a punto de extinguirse, pero, en 1853, permaneció en el nuevo mapa de municipios, habiéndosele anexionado las parroquias de Canedo y Fiães do Tâmega, esta última integrada posteriormente en el condado de Boticas.

La agricultura y la ganadería son las principales actividades económicas de la región, rica en gastronomía. El pescado de río, el cabrito, la ternera, el maíz, la col con judías, el pudin dulce y el «serrabulho» dulce son algunos de los principales manjares que han llevado a muchos turistas a visitar la comarca.

La riqueza paisajística de la región ha atraído a muchos visitantes en busca de naturaleza, cultura, ejercicio físico y actividades de ocio. Así, el municipio de Ribeira de Pena ofrece un conjunto de senderos únicos como «O Caminho do Abade», «A Levada de Stº Aleixo» y «Percurso pelo Rio Póio», verdaderas atracciones para los amantes de la naturaleza.